Se trata de otro abuso de poder contra una mujer indefensa en la ciudad de Malabo. La policía de la dictadura no para de maltratar, golpear, disparar, atropellar y asesinar a la gente indefensa. Actos criminales aprendidos del gran árbitro y moderador de movimientos de masas, el dictador Obiang Nguema.
Así hemos vivido un nuevo abuso de autoridad, además de otros tantos que venimos denunciando y que tampoco cesaremos de publicar y de anunciar a la comunidad internacional y a las organismos relacionados con los DDHH.
Los agentes del régimen lo pagaron con la Sra. Susana Nnang, que sobre las 19 horas de ayer 21 del presente mes, junto con otras amigas se subieron en un taxi para regresar a sus casas. Después, el llamado Manuel Abaga Ondo, conocido por Ema, apodo que le enorgullece, propinó un golpe en la cabeza a Susana Nnang. Hemos de recordar que este golpe es muy habitual y acostumbrado entre la gente de igual fuerza física en Guinea Ecuatorial. Suele ser bastante peligrosa y puede acabar con la vida de la persona que lo recibe. (Algunos lo llaman scout tete, golpe de cabeza). Es lamentable tener que describirlo, pero estamos obligados a hacerlo.
En Guinea de Obiang cuando un agente quiere sacar provecho no hay superior que lo detenga. Porque también los jefes suelen cometer atropellos y al ser imputados, no son castigados, solo son cambiados de destino.
Todo lo ocurrido, viene porque el jefe del puesto, que había controlado el coche, al conductor y a sus ocupantes, se puso furioso, arguyendo que quienes eren ellos para enseñarles lo que tienen que hacer, expresión esta muy usada por los agentes del régimen. El agente sin mas bajó del coche a Susana y la golpeó. El resultado de la agresión se muestra perfectamente en imagen que hemos publicamos.
Los hechos sucedieron en la ciudad de Malabo, en una rotonda llamada Arab Contractor, lugar por donde muchos Guineanos han tenido la desgracia de toparse con los agentes del "desorden" público, pagándolo muy caro.
En Guinea Ecuatorial, los agentes se suelen apostar en las vías públicas, sobre todo en las dos principales ciudades del país, Malabo y Bata, con el objetivo de encontrar a las víctimas que quieren extorsionar. Ni les importa la ordenación del tráfico, ni la seguridad de la población, solo les interesa atracar a la gente.
Obstaculizan la circulación, extorsionan a cualquier persona, sea extranjero o nativo y hacen su agosto con ellos.
Aunque el ministro cuentacuentos, el Sr. Alfonso Nsue Makui, se pronuncie a diario sobre la mejora de los derechos humanos en nuestro país, la realidad es muy diferente y se está haciendo cada día mas terrible e insoportable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario