Bingokom,24 julio,2020
C R I T E R I O
En
tiempo de crisis y de confusión como los que estamos
viviendo, suele ser normal y sin miedo a equivocarse,
que surjan preguntas sin respuestas; preguntas de las más
impertinentes que, si cabe duda, tendrán el sesgo de
cualquier creación humana; lo que nos mueve a creer que si
la verdad constata una evidencia y envuelta en una realidad
definida como la nuestra, nos urge identificarnos con un
proyecto y un criterio serio; entonces necesitaremos ser más
racionales, tener sentido común, y usar el criterio de la
verdad y de la autenticidad. A esto, añádele el sentido
crítico de las cosas y de los acontecimientos con que nos
enfrentamos todos los días.
Tener en consideración
un criterio a la hora de analizar y educar para la
solidaridad, para la justicia social, ( cfr; Profeta Amós
) para revivir la hospitalidad africana, sobre todo para lo
que venimos aludiendo esos días, educar para el respeto de
la dignidad de toda persona de cualquier raza, por encima
de intereses y amistades, debe ser el objetivo de todas las
políticas sociales de la que también está incluido el
proyecto evangélico del maestro Jesús de Nazaret.
Mi pregunta es: ¿con qué
nos identificamos? Quiero subrayar las palabras de un
teólogo africano Pénoukou de gran renombre, por si alguien
le interesa, cuando desmenuza con profundidad el contenido de
la tradición cristiana desde una óptica africana, aspectos
de la fe y la cultura, y sus implicaciones de la política
y sociedad africanas. Lo que no acabo de entender para
muchos africanistas cristianos de mi entorno que, para
conquistar la libertad para sus pueblos, empiezan por
criticar lo que en parte constituye la esencia del
cristianismo: “ El mensaje profético y los escritos del
libro sagrado. “ una cosa es aceptar el mensaje de Dios y
otra bien distinta es rechazarlo; las dos opciones son
posibles pero más posiblemente es tomar postura ante la
triste realidad de que nuestra cultura y sus valores se va
desapareciendo, juntamente con los mejores personajes, nuestros
ancestros; porque así nos han enseñado durante este último
medio siglo en el país que nos vio nacer. Y muchos, ni
siquiera lo plantean ni lo ven desde ésa óptica
socio-cultural. Es curioso; cuando atacamos a los demás sin
los propios criterios, lo que en realidad hacemos es
mostrar nuestra propia debilidad. Lamentablemente, eso es así.
Me impresionó el
evangelio comentado de ésta mañana en la Oración de
Jesús: El mismo Dios es nuestro referente; Jesús da
gracias a Dios Padre que muchas de las cosas que nos
vienen de lo alto, han sido concedidas no a los “sabios”
y entendidos, sino a la gente sencilla, a los pobres.
-- Cfr. Mt; 11, 25-30 – Aquí vemos que la fuerza y
la sabiduría del cristiano se encuentra en su debilidad. Y
a eso Dios nos llama a la humildad los que estamos cansados
y agobiados por los yugos pesados que dominan los poderes
de este mundo, ya no tanto a los colonos, sino más bien,
a los que pasan olímpicamente de la miseria y la opresión
de sus hermanos sólo porque pertenecen a una determinada
familia. En definitiva, echamos de menos una Iglesia
organizada desde arriba y desde los puestos de mando hasta
nuestras calles del país. Hace falta hombres y mujeres
valientes testigos de la ternura de Dios que acuden en
primer lugar a llevar a Jesús las penas y dolores que
sufrimos en estos momentos, sin respuestas.
Me consuela saber que
Dios propicia su sabiduría en todas las tradiciones,
incluidas de ante mano, las que todos hemos bebido: De las
fuentes Greco-romanas, como fuentes históricas, se abren al
mundo al fenómeno de las culturas, al hombre y
religiosamente plurales de las que tenemos en la actualidad.
Pero pocos lo hemos notado; porque hemos sido testigos
oculares de una dialéctica ahistórica que ha supuesto para
nosotros entre la falta memoria histórica, el silencio
colectivo, que lo llamo: “ el inconsciente colectivo del
miedo” que no es otra cosa que el mundillo del
oscurantismo que gobierna a los hombres que proclaman el
miedo como una bandera para ocultar lo que realmente ha
sido el africano ecuatorial. Así lo veo y así me atrevo
decirlo…
Una maquinaria de la nueva
evangelización para los tiempos que corren, todavía está
en el taller; y una vez arreglada, sabremos emprender un
nuevo camino para conquistar las libertades así como los
criterios de una fe adulta que no se apoye solo en
breves citas vagas del evangelio sin conexión, ni
objetividad, ni una crítica madura y consciente de la
religión y de la teología a nivel de nuestros hermanos
del áfrica central. Cuando hablo de la psicología de los
valores y la cultura, no agota ni es un reduccionismo de
ética de valores cristianos y humanos; es cierto que hablar
de nuestra ética de valores, alude a un componente
afectivo muy considerado; pero no es el fin cristiano ni
mucho menos de cualquiera institución, sino que toda
vivencia en el cristianismo no agota su esencia en las
costumbres, sino en cuanto lo más primordial: La ley
suprema del amor, que resume el compendio de la vida
cristiana: “ Amar como Cristo amó “ todo implica un
contenido y una motivación. Por qué tengo que amar, u obrar
rectamente con mis semejantes ?
El sociólogo y teólogo Jean
Marc Elá, nos ayudará a acercarnos y a entender algún
día, sobre la teología negra de liberación de pueblos
oprimidos. Claro que lo tenemos cerca. Una comprensión de la
revelación de Dios en la historia implica al mismo tiempo
para nosotros, una manifestación de Dios a través de la
historia en la liberación de los pueblos oprimidos por el
simple hecho de pertenecer a una comunidad cristiana o fuera
de ella. Entonces, la biblia tenía razón. La teología no
deja de ser misterio y relación, para un país que ha
perdido sus mejores recursos, a saber:
- Su historia
- Sus hombres
- Y su esencia
Ser africano y cristiano no
tiene ninguna regla de contradicción. No solo es cuestión
de carne y sangre sino más aun, un estado de espíritu y
mentalidad. Debo decir que se trata de un modo de sentir y
pensar; de percibir lo que pasa en mi pueblo, y su gente
y concebir el mundo, la historia reciente y el hombre, y
juzgarlo todo a la luz del modelo de fe en Dios de todos
los tiempos. No hay otra sensibilidad; es lo que hay; el
refranero fang reza así. “ Obiara befe, oyomo a befe
“ esto es: Naces en una generación, y envejeces con otra
generación: Auténtica-mente distintos, pero iguales en
dignidad y en nuestro recuerdo. Tenemos que contar la
autentica historia a nuestros nietos, antes de escribir otra
nueva. Una fuente sabe mejor cuando el agua es sana, creo
yo.
Hasta aquí no hemos contestado
a la pregunta “ Dónde vas guinea “… del mítico
cantante Maele ndó… para reproducir la historia necesitamos
un ambiente de cordialidad y de criterios verdaderos, porque
es el estilo habitual de comportarse las personas sinceras,
lúcidas y afectuosas que necesitan libertad y bienestar
social para con los suyos. Si otras veces hemos dicho aquí
que hay que educar en libertad, cómo no vamos a educar
también los sentimientos para un pueblo que clama libertad
y quiere escribir su historia ? Me uno a la gente que
aprecian la eficacia, como camino seguro, aunque tarde un
poco más de tiempo; y fuera los perjuicios ¡¡¡
El criterio de eficacia
tiene que sustentarse en la verdad y en beneficio del bien
común: dar lo que cada uno tiene de original e
irrepetible, lo que le hace distinto de los demás para la
construcción de la casa común; entonces el criterio de
eficacia no le faltará el criterio de verdad y bondad.
Cuantas veces me he preguntado. ¿ Somos esta Iglesia de
que habla el Nuevo Testamento ? Siempre han dicho que todos
los caminos llegan a Roma. Eso sí; si son eficaces y no
se pierde uno en medio de las amenazas y tormentas del
momento, que no son pocas, de verdad. Esos mismos caminos
son los que nos habla de la vida de los cristianos
comprometidos en las tareas civiles:
Somos
Sal de la tierra cuando sepamos gestionar de forma integral
los recursos
Naturales,
cuando cada cristiano sepamos compartir con lo poco que cada
uno tiene para dar sabor a la vida de miles hambrientos
que llenan nuestras ciudades y Pueblos. Somos sal de la
tierra cuando nuestra Iglesia sea capaz de curar las
heridas y darle la brocha de la reconciliación y calor a
los corazones hambrientos y sedientos de justicia……Sin
embargo, nadie es sal de la tierra ni luz del mundo cuando
miramos por otro lado y nos cuesta poner en el lado del
oprimido; nadamos en la mar de injusticias… pero como
aquello no va por mí, no pasa absolutamente, nada. Muchos
me preguntan. ¿De qué Iglesia hablamos ?
EL PAPA HABLA QUE HEMOS DE
SALIR HACIA LAS PERIFERIAS, SER UNA IGLESIA NO AISLADA SINO
ABIERTA, Y SER LUZ Y SAL PARA COMUNICAR A TODOS LA VERDAD
DEFINITIVA DE DIOS CON NUESTRAS OBRAS DE FE Y CARIDAD.
Veo con incertidumbre la
situación de los jóvenes guineo ecuatorianos y afro
descendientes… deseosos de un proyecto común y estable;
estamos apegados a las ofertas del mundo consumidor, a las
nuevas tecnologías, o las últimas modas por ejemplo. Y no
son ellos mismos capaces de defenderse de esta nueva
esclavitud consumista y la era postmoderna que está a la
vuelta de la esquina, … válgame Dios..¡! Algo insólito así
ocurre en Guinea ecuatorial: La gente que tiene posibilidad
de ver imágenes de televisión internacional lo hacen;
mientras que no saben lo que ocurre en la casa del vecino
de barrio…Qué pena… cuando conviven juntos la
intolerancia y la ignorancia absolutas no hay nada que
hacer, pero sí tenemos mucho que perder. Somos nosotros los
adultos los que tenemos que defenderlos de la manipulación
y la falta del sentido crítico de las cosas y no en las
apariencias sensibles porque detrás de las apariencias,
siempre hay algo que no se ve.
Una educación para criterios
sería lograr que los jóvenes descubran su individualidad
dentro de una comunidad plural de pueblos en su objetividad;
de tal manera que se desarrolle al máximo y lleguen a la
libertad de un discernimiento serio de poder dirigirse a sí
mismos, nos recuerda Bernabé Tierno.
Quiero situarme en el terreno
de lo previsible con criterios evangélicos ya que el
evangelio tiene algo que decir e impulsar en nuestros países
sedientos de dignidad humana y me viene a la mente, una
cita del Papa Pablo VI a los obispos africanos, en Roma
1977: “ La fe, que dice relación a Dios, no puede dejar
de transformar las relaciones humanas; cada página del
evangelio incita a prescindir del espíritu de dominación y
de privilegio, a servir al prójimo como a un hermano o
hacerle artífice de justicia y paz”.
Cómo me gustaría, estimados
amigos, insertar el mensaje cristiano en mi cultura política
conservando los propios modos de pensar, de actuar, y de
vivir afectuosamente todo lo que es y aspiro ser de mi
mentalidad guineo ecuatoriano.
Sólo me queda desear un
feliz día a todos.